En este globalizado mundo, de
un tiempo a esta parte hemos podido ver como el deporte del fútbol evoluciona
al igual que la sociedad en la que vivimos. Hoy en día el fútbol no conoce
fronteras y aquellos que hace años apenas llegaban a comprender este bello
deporte, hoy crecen y evolucionan desde la base hasta la élite del fútbol.
Este es el plano en el que se
mueve desde hace tiempo la lejana China, desconocida para muchos se ha
propuesto crecer hasta donde sus propios medios le permitan y evolucionar en el
mundo del fútbol.
Fotosybanquillo ha hablado
con Roberto González Gaspar, un joven entrenador madrileño que hace 8 meses cambio
los banquillos de Pinto, por vivir su propia aventura en los campos de fútbol
de Jiujiang, provincia de Jiangxi (China).
Primero
gracias Roberto por atender a fotosybanquillo ¿Qué tal por China?
Gracias a vosotros.
No puedo quejarme de mi vida en China,
me he adaptado bien, me tratan muy bien y están muy pendientes de mí. Estoy
contento y no tengo demasiados problemas por la distancia, tengo un trabajo
cómodo que además me permite desarrollarme y dedicarme exclusivamente a lo que
me gusta.
¿Muy diferente la vida que en España?
La diferencia es abismal, de un
extremo a otro. Cualquier cosa que te imagines es distinta. Ya sean las costumbres,
lenguaje, escritura, o el carácter y manera de actuar de la gente. Como
costumbre que a mi personalmente me hace gracia es que mientras estás con tu
teléfono móvil mirando algo, un mensaje o una foto o cualquier cosa, no tienen
reparo en ponerse detrás a mirar contigo descaradamente, una persona que quizá
ni si quiera conoces. Evidentemente eso en España es impensable. O ver que eres
extranjero y simplemente ponerse a grabarte en vídeo. Tienen unos conceptos de
privacidad bastante distintos.
Cualquier cosa que te imagines es
distinta, el estar en un establecimiento comiendo y que se te sienten a comer
en la misma mesa que tu. Son cosas que chocan, todo lo que ves es chocante,
pero te acostumbras y lo acabas viendo desde la normalidad.
Dejas España, concretamente un Juvenil en Pinto, por aventurarte
a China ¿Qué te lleva a tomar
esa decisión?
No solo dejo el juvenil del AdyC Pinto
si no que también dejo aparcado mi trabajo del día a día en el que llevaba 12
años solicitando una excedencia, aparte
de mi trabajo como “Scout” en el Club Atlético de Madrid.
Y es precisamente ese uno de los
motivos que me llevan a venirme, la dificultad para compaginar el trabajo que
me mantiene y el trabajo que me permite realizar lo que amo y mi máxima
devoción.
Por otra parte tenía muchas ganas de
una experiencia fuera de España y que mejor que China, donde el fútbol está
viviendo una expansión enorme y demandan profesionales españoles.
Esta aventura por tierras chinas ¿Ha cumplido tus expectativas?
¿Hacia dónde caminan tus perspectivas profesionales?
Analizando fríamente, creo que si que
se cumplen todas mis expectativas, pero soy muy ambicioso y nunca paro, siempre
quiero y trabajo por llegar más lejos. De momento tengo muchos proyectos en el
aire muy bonitos y muy ilusionantes, pasito a pasito vamos a ver si vamos
avanzando y continuamos creciendo dentro del fútbol Chino, tengo claro que a
dia de hoy no quiero volver a España de momento.
¿Cómo es el fútbol en China? ¿Qué diferencias
hay entre nuestro fútbol y el chino? Metodologías, sistema de
entrenamiento, sistemas de juego, preparación de partidos, nivel competitivo,
organización…
Las metodologías que utilizan los distintos entrenadores que voy
a visitar son arcaicas, entrenamientos planos sin ningún contenido cognitivo,
donde individualizan la técnica del jugador pero no son capaces de integrar a
todos o varios jugadores juntos en el mismo ejercicio, al igual que son
incapaces de trabajar todos o varios de los aspectos del entrenamiento juntos.
Un balón por niño, eso ya anula la colectividad del
entrenamiento, la intensidad y la competitividad, si en un partido de fútbol se
enfrentan 22 jugadores con solo un balón de por medio, no concibo el tener 22
jugadores y 22 balones.
En cuanto a la organización, como digo es un fútbol muy joven
que carece de bases, pero quieren hacerlo a lo grande, de repente te encuentras
en una liga donde tienes un doctor por partido, cuarteto arbitral más un
delegado de mesa, 5 o 6 recoge pelotas uniformados, y todo lo bonito de la
ceremonia de un partido de Champions League con todo lo que puedas imaginar. Pero
luego no están preparados en lo básico que es tener unos campos adecuados para
la práctica, unos vestuarios o una simple aplicación que actualice la tabla de
clasificaciones sin que lo tenga que hacer el becario de turno el miércoles de
la siguiente semana.
Como todo en la vida es factible de mejorar ¿Qué podríamos aprender aquí del
fútbol chino que nos hiciera mejorar? Metodologías,
sistema de entrenamiento, sistemas de juego, preparación de partidos, nivel
competitivo, organización…
Hay generalmente dos cosas, y creo que una de ellas es inviable
y la otra poco probable.
La primera la inversión en ligas, árbitros y despliegue en
general, y la segunda y más importante el respeto por el rival que es máximo,
al acabar el partido, por ejemplo, se dan todos de la mano y van agradecer a
los árbitros y mostrarles respeto, y luego al banquillo rival a hacer lo mismo.
Individualizando nuestro análisis… ¿Cómo es el futbolista chino?
El futbolista chino a estos niveles,
en la base, no entiende el juego, no es capaz de comprender por ejemplo que
realizando una basculación hacia el lado débil dificultan que el rival juegue
por dentro y prefieren permanecer amplios y dejar pasillos interiores jugada
tras jugada, sin ver ningún problema. O simplemente el quedarse mirando el
balón después de cualquier acción
técnica como si la jugada hubiera terminado.
Les cuesta mucho todo lo que conlleve
una carga cognitiva por que no están acostumbrados a pensar, tienes que
trabajar mucho los videos para que se den cuenta de que si se acerca al
poseedor del balón que disfruta de una situación de 1vs1 con superioridad posicional
y cualitativa le trae la ayuda defensiva de su marca y cierra espacios, y aún
así después de comprenderlo y trabajarlo en los entrenamientos sale al campo y
en la primera jugada te lo realiza igual.
O simplemente el hecho de realizar una
temporización defensiva esperando a la ayuda del compañero y parando un
contraataque, después de trabajarlo en el campo y sobre los vídeos, siguen
picando y entrando a la primera oportunidad que tienen lo que limita las
opciones defensivas de, equipo en transición. Tiene la picardía que pueden
tener nuestros chicos en Europa, carecen de intensidad alguna y competitivamente
son flojos.
También he observado por parte de los
padres una sobre protección que considero los daña en el aspecto de que reciben
un golpe o una caída y ya están asustados, por que están acostumbrados a que
les den demasiada importancia, al principio cuando les dices que no pasa nada
que siga jugando te mira raro, pero luego se da cuenta de que efectivamente, no
pasa nada.
En los últimos tiempos hemos visto como muchos profesionales
españoles viajan a emprender aventuras como la tuya ¿Por qué hay tanta necesidad de
entrenadores Españoles?
Por una parte es evidente la falta de
profesionales cualificados en el fútbol Chino y su líder tiene el objetivo de
ser una potencia mundial en lo que al fútbol se refiere.
Por otro lado los éxitos de los equipos
españoles y la selección en los últimos tiempos son un cartel muy grande, en
cuanto dices que eres español te dicen “fútbol”.
Y por último para que todo case, es
evidente que se está realizando una gran labor de formación de entrenadores en
España y eso se acaba valorando más fuera que en nuestro propio país, lo que no
deja duda alguna de a que país acudir a buscarlos.
Agradecer a Roberto González Gaspar su atención y desearle la mayor de las suertes tanto a título individual como global, viendo y viviendo en primera persona el crecimiento de un fútbol como el chino.
Fotosybanquillo