En
el actual fútbol de élite la aparición de un profesional como Pep Guardiola ha
marcado un antes y un después, su metodología de trabajo ha servido para que
muchos vieran en él un punto de inflexión en la evolución táctica de nuestro
fútbol moderno.
Los
tiempos que marcó en su brillante etapa en el FC. Barcelona han servido para descubrir al mundo moderno una nueva y ambiciosa manera
de plantear, vivir y producir el fútbol. Esto contrasta con los diferentes
resultados y maneras de encajar el éxito en sus siguientes etapas en Alemania y
la actual en Inglaterra.
Fotosybanquillo
pasa por encima de los tres equipos de Guardiola en la élite mundial tratando
de mostrar cómo es su fútbol, que características aporta al juego, en que se
parece y en que difiere un equipo de otro.
PEP
GUARDIOLA EN EL FC. BARCELONA
La
etapa de Pep en el FC. Barcelona se inició bajo el eco de un contundente
mensaje: “No estoy pidiendo resultados, sólo rendimiento. No voy a
aceptar los que especulen sobre el rendimiento”.
A
este verbo se le unieron decisiones deportivas como la salida de Deco y
Ronaldinho, las llegadas de Alves y Piqué, aunque lo que sin duda supo leer
mejor el bueno de Pep fue el bautizo futbolístico de figuras como Pedro y Sergio
Busquets.
Después
de un inicio incierto con el Numancia y Racing de Santander respectivamente, la
máquina blaugrana ajustó sus piezas y nos regalaron a todos las mejores horas
del fútbol moderno.
El Barca
de Guardiola, como conseguir defender atacando
Su
característica y principal esencia de su juego era tratar de dominar mediante
la posesión del balón en campo rival, haciéndolo circular con la precisión
adecuada que permita desordenar al contrario, mientras conseguía ordenarse a sí
mismo.
Los
sistemas de juego que se usaron en aquel glorioso equipo de fútbol van desde el
1-4-3-3,
1-4-2-3-1, 1-3-4-3 y 1-4-3-1-2.
Sea cual fuere el dibujo usado por Pep en ataque el balón
transitaba siempre en un campo muy grande y con mucha movilidad interior que
permitiera crear infinidad de espacios y situaciones claras de ataque, tanto
por fuera como dentro, aparecer sin llegar a estar.
La figura del medio centro fijo siempre presente en la jugada
marcaba el principio del orden del juego del equipo y ahí Sergio Busquets se
hizo el mas grande.
Siempre con extremos abiertos y con los laterales más
móviles vistos hasta el momento. La clave de la posesión del juego blaugrana
estaba en la inteligencia móvil de los Iniesta y Xavi, los cuales siempre
ofrecían una línea de pase clara y una salida correcta al juego, donde siempre
se podían disfrutar de 4 potenciales receptores posibles de la pelota que
ofrecían salida clara al juego.
En los últimos metros, la velocidad para ocupar los espacios
libres creados anteriormente unido al extraordinario talento para el fútbol de
sus futbolistas, tenía como resultado infinidad de situaciones de gol.
El comportamiento defensivo del equipo de Guardiola era claro
cerrar espacios con todos los jugadores muy juntos, pressing tras pérdida con
alto componente de intensidad y agresividad, siempre con la premisa clara de
robar el balón contra más cerca del área rival mejor.
Messi y el falso 9, la Evolución de un modelo
Existe un punto de inflexión en el FC Barcelona de Guardiola que marcó una evolución y posible mejora en el juego y su birllantez, ese el momento en el que el entrenador catalán decide situar a Lionel Messi en una posición mas centrada, nacía el Barca del falso nueve.
El objetivo era claro, crear superioridades en el centro del campo llevando a su jugador mas determinante a moverse a espaldas de los medio centros rivales. Esta variante sufrió una evolución más, cuando Guardiola prescindió de un defensa central para situar un delantero centro por delante del falso nueve, de este modo neutralizar los planteamientos rivales centrados siempre en parar la figura del falso nueve, Leo Messi.
PEP GUARDIOLA EN EL
BAYERN MUNICH
Cuando
Guardiola decidió marcharse del FC Barcelona para llegar al Bayern de Múnich en
la temporada 2013-14, era considerado uno de los mejores entrenadores del mundo
con el título conseguido en 2011 FIFA
World Coach of the Year. Con ese caché sobre sus hombros, el técnico
catalán llegó al Bayern con un panorama muy distinto, al que encontró en su
llegada al Barcelona. El Bayern venía de ganar el Triplete bajo la dirección
técnica de Jupp Heynckes y el club no reparó en gastos a la hora de los
refuerzos.
Con esta perspectiva, de Guardiola no sólo se esperaba jugar de manera excelente como en Barcelona, sino que estaba obligado a ganar. Y si bien lo hizo, la gesta no estuvo a la altura de lo esperado, al no conseguir la Champions durante su estancia en tierras alemanas.
Con esta perspectiva, de Guardiola no sólo se esperaba jugar de manera excelente como en Barcelona, sino que estaba obligado a ganar. Y si bien lo hizo, la gesta no estuvo a la altura de lo esperado, al no conseguir la Champions durante su estancia en tierras alemanas.
LOS NÚMEROS DE PEP
GUARDIOLA EN EL BAYER
El
entrenador Pep Guardiola consiguió con el Bayern Múnich 7 títulos (de 2013 a
2016)
Mundial
de Clubes: 2013
Supercopa
Europea: 2013
Bundesliga:
2014, 2015, 2016
Copa Alemana: 2014, 2016
SISTEMA TÁCTICO DE PEP GUARDIOLA EN EL BAYERN MUNICH
Guardiola en el FC. Barcelona,
posiblemente uno de los mejores equipos de la historia y con tres jugadores
especiales, únicos e irrepetibles como Messi, Xavi e Iniesta logró encandilar
al mundo con un juego de infinitos pases y precisión absoluta consiguiendo un
record histórico de títulos.
Para ello utilizó de forma habitual al
sistema 1-4-3-3 que había sido el santo y seña del Dream Team. En numerosos
partidos recurrió también al sistema 1-3-4-3 con sólo tres defensas y la
acumulación de jugadores en el centro del campo que permitían el famoso juego
del “tiquitaca” para sorprender al
rival generando espacios libres en ataque.
En el Bayern contando con muy buenos
jugadores, podríamos decir que muchos de los mejores jugadores del panorama
internacional, Guardiola era sabedor de no disponer de jugadores especiales
como Messí, Xavi o Iniesta, para ello debía utilizar un sistema en el que la
suma del esfuerzo colectivo fuera mayor que la suma de las partes individuales.
Se decía que para jugar en el Bayer de
Pep, “había que correr más para defender
que para atacar, muy precisos con el balón e inteligentes sin él, respetar al
rival, pero descarados en lo futbolístico, desplazando el balón en profundidad
y amplitud a lo largo del campo”. Guardiola quería jugadores comprometidos con
su idea o modelo de juego.
En su etapa como entrenador del Bayern
Múnich, sorprendiendo a propios y extraños recurriendo a una variante del
conocido “sistema W-M” o sistema 1-3-4-3 utilizado por Herbert Chapman en el Portsmouth y el Arsenal con un cuadrado o rombo en
el centro durante casi tres décadas, hasta 1953 tras la famosa derrota de
Inglaterra contra Hungría en Wembley que dejo en evidencia las carencias
defensivas de este sistema.
Podríamos decir que la “variante W-W” utilizada por Pep se basa
en el conocido sistema 1-4-1-4-1, pero tiene una particularidad propia del
sistema W-M de Herbert Chapman, los jugadores no están dispuestos sobre líneas
teóricas en el campo, sino que están escalonados formando un dibujo de doble W.
Recurriendo a lo sencillo, Pep
necesitaba para su modelo de juego inculcar a sus jugadores que la idea
fundamental para alcanzar los objetivos era establecer un grupo compuesto por 5
defensores y 5 atacantes además del portero consiguiendo un equipo realmente
ofensivo en ataque y agresivo cuando no disponía el balón.
Tal vez Guardiola no disponía de los
jugadores excelentes que tuvo en el Barsa, pero en el Bayern disponía de muy buenos
jugadores con un estado de forma física superior.
El Manchester City de Guardiola
Hasta
el momento la esperanza despertada con la llegada de Pep Guardiola al FC Barcelona
no se ha visto recompensada con buenos resultados. Eliminados de la Liga de
campeones y con una travesía poco brillante en liga, el proyecto de Guardiola
en Manchester demuestra que está aún muy verde y que si algo necesita es
paciencia para ajustar sus piezas e ideas.
El
equipo Inglés de Guardiola plantea una amplia variedad de dibujos tácticos, en
los cuales modifica su juego de posición en función de lo que se encuentra en
el rival. Desde el 1-4-3-3 hasta el 1-3-4-3, llegando a 1-2-3-2-3 la riqueza
táctica de conocimientos que aporta un hombre como Guardiola permite esta
variedad táctica.
El
fútbol de Guardiola sigue buscando la posesión de la pelota como cimiento principal
de su modelo de juego.
En
fase ofensiva la principal novedad que enseña este equipo es la versatilidad de
movimientos que se exige a los laterales, los cuales suelen entrar a jugar por
dentro llegando a comportarse como auténticos interiores. Hombres como Zabaleta
o Kolarov, es habitual verles en labores organizativas del juego en posiciones más
interiores, sirviendo de apoyo útil y real al medio centro fijo.
Por
delante del nombrado medio fijo se mueven dos medios más móviles encargados de
ofrecer líneas de pase continuas y hacer progresar el juego de ataque. La
amplitud del juego es nuevamente para
los extremos, los cuales abren el campo ocupando ambas bandas para desde allí
partir tanto de manera vertical como diagonal.
A
partir de estas directrices claras, el juego del Manchester City, de la mano de
Guardiola, sufre durante el transcurso del partido diferentes modificaciones
tácticas donde podemos ver una línea defensiva de tres jugadores, o bien dos
puntas… etc.
En
fase defensiva la premisa es clara, línea de presión alta, defensa adelantada y en algunos momentos marcas al hombre en casi todo el campo. Existe el repliegue medio o bajo, como
vehículo para juntar líneas, pero la presión tras pérdida es clara y se plantea
en cualquier parte del campo.
Un equipo que parece no
funcionar
El
rendimiento del City parece haberse visto comprometido llegando a desparecer de
la lucha de algunos títulos del gusto de Pep como la Liga de campeones.
¿Cuál
es el problema entonces? Analizando el rendimiento y resultado del equipo esta
temporada encontramos algunas variables que podrían ser causa de la pérdida de
rumbo del equipo Inglés.
1.
Bajo
rendimiento de algunos jugadores.
Futbolistas
como Stones, Sané e incluso Nolito, están rindiendo por debajo del nivel
esperado llegando a tener menos minutos de los que en principio se planeaban.
2.
Futbolistas
inadecuados.
Algunos
de los altos nombres de este equipo se encuentran bajo unas directrices tácticas
y un modelo de juego que pudiera ser inadecuado para las características que
ellos aportan al fútbol.
Volviendo
al caso de Stones, vemos un defensa central con excelente salida de balón pero
que sufre mucho a la hora de defender con mucho espacio, donde no destaca por
su velocidad.
Laterales
como Sagna, Zabaleta o Kolarov, se enfrentan por primera vez a tener que jugar
en posiciones interiores con labores más organizativas, cuando hasta el momento
siempre han sido hombres de banda.
Futbolistas
de primer nivel como Kevin de Bruyne cambian de posición con demasiada asiduidad,
pasando del extremo al medio campo
incluso en el mismo partido. El caso de la estrella belga es fácil de distinguir
pues por mucho que pueda parecer en el modelo de juego de Guardiola, De Bruyne
no es un medio centro al uso sino más bien un media punta de ida y vuelta o lo
que en Inglaterra llaman “Box to Box”.
3.
Defensa
descompensada
La
línea defensiva está siendo el eje central de todas las críticas del equipo de
Pep Guardiola, donde encontramos problemas de todo tipo.
·
Bajo
rendimiento, John Stones el defensa promesa del fútbol inglés rinde por debajo
de lo que prometía superado quizá por un método o por la importancia mediática
del equipo y su entrenador.
·
Lesiones,
Vicent Kompany uno de los principales defensas centrales del equipo ocupa la
mayoría de su tiempo en recuperarse de lesiones.
·
Descompensación,
ante los diferentes casos de Stones y Kompany se ha podido ver una plantilla desequilibrada
donde no existe un tercer central de primer nivel.
·
Los
laterales, ninguno
de los laterales Sagna, Zabaleta, Kolarov y Clichy es de primer nivel. Los principales
problemas que reflejan son sin duda la media de edad que acumulan entre los
cuatro y la falta de entendimiento del modelo de juego que a veces demuestran.
Sea
como fuere, la figura de Pep Guardiola ha sido, es y será siempre de primer
nivel en el mundo del fútbol. La calidad de su trabajo no tiene lugar a duda y su palmarés es envidiado por todos. Si no llegan los éxitos ahora, no tardaran en
hacerlo pues la riqueza y multitud de armas que tiene en su mano el bueno de
Pep garantizan fútbol auténtico y de gran nivel.
¡Suerte
Pep!
Jose Luis Mejías Pozuelo
Félix de Blas Martín
@fotosybanquillo