Empiezan
a llegar a Fotosybanquillo las primeras opiniones profesionales sobre los
entrenadores vascos, en este caso, nos escribe el futbolista y actual profesor de CENAFE Jorge Sanmiguel Codina.
Sanmiguel, como se le conoce deportivamente, coincidió con el técnico vasco
Carlos Terrazas en el C.D. Guadalajara, ascendiendo al equipo alcarreño a 2ª
división A (Temp. 2010/2011). Recientemente, Sanmiguel ha terminado un Máster Oficial de Intervención
Psicológica en el Desarrollo y la Educación.
En
este caso se trata también sin duda de una opinión desde el conocimiento y la
experiencia del día a día con uno de los entrenadores más valorados del fútbol
español, os dejamos con su exposición.
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En el norte de España se tiene una gran devoción por este
deporte. Me atrevería a decir que lo quieren “sin condicionantes” puesto que
siempre que he subido a estas tierras, con independencia de entidad y
clasificación, los estadios han presentado una buena afluencia de
público.
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El respeto al deporte empieza por el deportista. Es raro ver a la
gente insultar a los jugadores sin más.
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Su cultura impregna el fútbol. Más allá del conocimiento de la
lógica interna del juego, en sus opiniones y conductas se ven valores como el
esfuerzo y pundonor, la paciencia y la nobleza.
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Más allá de sus ideales políticos en los cuales como deportista
nunca entro, puedo afirmar que en su inmensa mayoría son grandes compañeros de
equipo.
Creo que estos argumentos pueden llevar a uno a pensar ¿por qué
salen tantos entrenadores vascos con calidad?
El técnico vasco, Carlos Terrazas |
Hombre multidisciplinar, contempla el fútbol como parte de la
vida. Todo influye en todo y todo esta interrelacionado (algo parecido a las
Teorías Psicológicas del Gestalt; pensamiento holístico).
Sus decisiones casi siempre se basan en reflexiones profundas,
cuya visión de las cosas se centra en tres momentos: corto, medio y largo
plazo. El tiempo para él es tan relativo como las circunstancias.
Siempre le estaré agradecido por darme otra visión del futbol y de
las cosas que me rodean a diario.
Jorge Sanmiguel Codina